martes, 19 de abril de 2011

Segundos Patógenos

Inválido de medrar,

el cielo encierra en un claustro mis deseos
la urbe vuelve a gritar...

Sonrisas irrelevantes,
amores nacidos en otro planeta,
todo parece indicar,
que los fantasmas de hoy no serán los de antes.

Muestro escuetamente
mi alma desnuda esperando más cicatrices
la urbe vuelve a callar...

Espero lo inesperado
intentando derogar mi mente
aunque por lo general siempre vence

Mi felicidad introvertida,
mi odio no guarda pudor
estoy cansado de mensajes fatídicos
estoy cansado de pensamientos estólidos de vida.





Hermosa Maldición

Hermosa maldición

apareces silenciosa entre mis recuerdos y mi presente,
torturando mi corazón,
con tu infinito donaire

Maldigo con todos mis fuerzas el días,
en que el amor te hizo tan perfecta,
y a mi alma tan indefensa
creando un iluso sentimiento de odiarte,
pues tendría que morir con cada estrella, antes de dejar de amarte.

¿Quién eres? desnúdate temerosa rosa, hazme daño,
hazme tuyo y acaba con este engaño.

Hermosa maldición, eres hermosa pues eres tu,
y eres maldición, pues voy a tenerte y nuca voy a tenerte,
y lo siento, y me duele, y rar vez y casi nunca, y me alegro.

Te amo y no te amo, te necesito y no te necesito,
sin ti muero y por ti vivo, te quiero y no te quiero,
¿es tan difícil de entender?

Espada de doble filo, sonríe que eres ternura, mi caos,
mi delirio y mi cura.
Espada de doble filo, bésame como aquella vez
que nuca me besaste
y atraviesa mi pecho para acabar con esta tortura.

Aquella

Letal embrujo de tus ojos como el amanecer

nací en tu sonrisa,
y en ella la brisa me hizo perecer,
pues fue tu encanto indestructible
como el acero que tu corazón rige
y fue apenas perceptible
el sentimiento de odiarte y amarte que mi corazón exige.

Eres princesa, lejos de un reino olvidado
pero que aún vive, aún resiste,
ante el pecado sagrado de un ángel en el que me he convertido,
o hubiera querido ser...
para cuidar a aquella alma tan frágil, tan indefensa,
pero a la vez tan llena de ti.

Como quisiera no haberte conocido
pues ahora me llamo vacío
no hay aire porque...
¿Qué es lo que queda después de un sueño destruido?
¿Dónde es que está el sepulcro de una ilusión a la cual han partido?

Tú eres todo y yo soy tú,
tan sencillo como eso.
No importan las furiosas tormentas
ni las bestias con máscaras de caballeros
pues somos magia y estamos llenos
de un destino ajeno al que no comprendemos
pero que nos seduce lentamente
como una rosa al despertar al sol en sus penumbras
tan ávida de vida
De un ayer que me embriagó con tu nombre
y como un hoy mis alas cortaron,
pues mañana caeré muerto sobre tus brazos y tus pensamientos
más secretos dibujados tal vez sobre mi alma.











Mi silla de propulsión a chorro

No caben dudas, esto será una dinastía

de personajes letargos caminando a mi lado una y otra vez
una travesía llena de arenas movedizas
y yo en mi silla de ruedas a propulsión a chorro.

Lloran estrellas sobre mi camino desterrado
imploro piedad a reyes que no responden.

Encontraré bailes esperando una decisión
cambiaré, como la ropa interior, el amor por dolor,
y en el dolor me encontraré.

Risas nacidas en la banca del parque
sexo dentro de un caparazón de esmalte
penumbras que juguetean con mis momentos frágiles
todo, absolutamente todo, lo he visto en aquel libro sin autor

Ayer puse mi vida sobre una hoja de papel
cogí un borrador Faber-Castell e intenté borrarla
No pude. Y apareció.
Tú imagen, su imagen, la imagen, exploré el desencanto.

Todos viven en contradicciones, en mi camino, en sus caminos
y esa es la esencia, el equilibrio de un sin sentido
según dicen sustentado
y yo les digo: ¡A la mierda con todo esto!

Avanzaré retando al óbito del vigor
y caminaré y caminaré sin mirar por la ventana y
desapareciendo del espejo
escribiré el cuándo, cómo, dónde y el porqué de mis decisiones.

Pero por ahora
ayúdame a encender esta silla de ruedas con propulsión a chorro.