Y qué es lo que queda de una mujer distorcionada?
albergada en el insolvente afecto de una plebeya
insultos y políticas abyectas
ternura pronunciada en otros verbos.
Le gusta el placer que no acontece a su existencia
y se retuerse virtuosa en su calamidad
la observo taciturno e indiferente
me habla y rompe su vestido de princesa
para correr desnuda en su jardín de minas.
cenizas bizarras acompañan aquel momento
palpitamos el éxtasis de ese momento
encontramos la nomenclatura perfecta de ese momento
el odio es la base fundamental y casi celestial de ese momento.
una aucencia
algunos colonos de tierras remotas
esfuerzos por alcanzar lo no entendido
es mejor el silencio
cuando hay tanto que decir.
hola
viernes, 11 de abril de 2008
Hola
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario